ARTÍCULO DE INVESTIGACIÓN / ORIGINAL RESEARCH PAPER

Aproximadores y atenuadores en el español de Chile: el caso de como y como que

Approximators and mitigators in Chilean Spanish: The case of como and como que

Lissette Andrea Mondaca Becerra

Departamento de Filologia Espanyola, Facultat de Filologia, Traducció i Comunicació, Universitat de València, Valencia, España

lismonbe@alumni.uv.es

https://orcid.org/0000-0001-6057-1911

https://doi.org/10.17710/tep.2019.5.1.3mondacabecerra

 

ACCESO ABIERTO / OPEN ACCESS

Cita: Mondaca Becerra, Lissette Andrea (2019). Aproximadores y atenuadores en el español de Chile: el caso de como y como que. Textos en Proceso, 5(1), pp. 29-52. https://doi.org/10.17710/tep.2019.5.1.3mondacabecerra

Editor: Ariel Cordisco, Instituto de Lingüística, Universidad de Buenos Aires, Argentina

Recibido:  15/03/2019

Aceptado: 01/06/ 2019

Financiación: La realización de este artículo ha sido posible gracias al financiamiento de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (CONICYT), Gobierno de Chile, a través de su Programa de Formación de Capital Humano Avanzado, Becas de Doctorado en el Extranjero/2018 – 72190244.

Conflicto de intereses: La autora ha declarado que no posee conflictos de intereses.

Copyright: © Lissette Andrea Mondaca Becerra. Esta obra está bajo licencia Creative Commons Reconocimiento 4.0.

 

Resumen

En el presente trabajo se realiza un análisis del uso de los aproximadores como y como que en el español de Chile y la vinculación de su valor semántico aproximador con la atenuación pragmática. Diversos son los trabajos que han reconocido en el marcador como un valor aproximativo (Mihatsch, 2009, 2010; Jørgensen y Stenstrøm 2009; Jørgensen, 2011; Holmvik, 2011; Kornfeld, 2013; Kern, 2014; Jiménez y Flores-Ferrán, 2018) y también un valor atenuador (Puga, 1997; Briz, 1998; Jørgensen, 2011; Holmvik, 2011; Kornfeld, 2013, Panussis, 2016; Mondaca, 2017; Panussis y San Martín, 2017). Así, el objetivo es analizar la relación que existe entre la aproximación semántica y la atenuación pragmática por medio de estas partículas, con el fin de establecer si todos aquellos usos aproximadores de como y como que desempeñan también una función atenuadora. Del mismo modo, se propone una descripción general de aquellos contextos que motivan a los hablantes chilenos a aproximar y a atenuar su discurso a través de como y como que. Para esto, se han utilizado 24 entrevistas sociolingüísticas extraídas del corpus recopilado en el Proyecto Fondecyt 11110211. Los principales resultados dan cuenta de que como es un aproximador semántico que, en aquellos contextos donde el hablante busca salvaguardar su imagen, adquiere una función pragmática atenuante, mientras que, por su parte, como que constituye una partícula cuya función predominante es la atenuación.

Palabras clave: como, como que, aproximación, atenuación, español de Chile

Abstract

This article analyses the use of the approximators como and como que in Chilean Spanish, and the link between their approximative semantic value and pragmatic mitigation. Previous works have given the marker como an approximative value (Mihatsch, 2009, 2010; Jørgensen and Stenstrøm 2009; Jørgensen, 2011; Holmvik, 2011; Kornfeld, 2013; Kern, 2014; Jiménez and Flores-Ferrán, 2018), and also a mitigating one (Puga, 1997; Briz, 1998; Jørgensen, 2011; Holmvik, 2011; Kornfeld, 2013, Panussis, 2016; Mondaca, 2017; Panussis and San Martín, 2017). Thus, the objective here is to analyze the relationship between semantic approximation and pragmatic mitigation through these particles, in order to establish whether all those approximative uses of como and como que also perform a mitigating function. Likewise, this paper seeks to propose a general description of those contexts that motivate Chilean speakers to approximate and mitigate their discourse through como and como que. For this purposes, 24 sociolinguistic interviews extracted from the corpus compiled in the Fondecyt Project 11110211 have been used. The main results show that como is a semantic approximator that, in those contexts where the speaker seeks to safeguard his or her face, acquires a pragmatic mitigation function, while como que, on the other hand, is a particle which predominant function is to mitigate.

Keywords: como, como que, approximation, mitigation, Chilean Spanish

1. Introducción

En la última década diversos estudios han dado cuenta del carácter polifuncional de la partícula como en diferentes variedades del español (Mihatsch, 2009, 2010; Jørgensen y Stenstrøm 2009; Jørgensen, 2011; Holmvik, 2011; Kornfeld, 2013; Kern, 2014; Jiménez y Flores-Ferrán, 2018). Las funciones pragmáticas que cumple esta partícula en el discurso oral también han sido investigadas y descritas en un número reducido de trabajos (contrastivos, variacionales, entre otros) centrados en el español de Chile (Jørgensen, 2011; Panussis, 2016; Mondaca, 2017; Panussis y San Martín, 2017). En estos estudios se ha establecido que como cumple las siguientes funciones: aproximación numérica[1], ejemplificación, introducción de discurso directo, retardación o relleno y atenuación. De estas funciones, de acuerdo con los estudios previos (Panussis y San Martín, 2017), la atenuación es la función discursiva principal y más frecuente de como y como que.

Los objetivos del presente trabajo son tres. En primer lugar, se pretende estudiar la relación (y la distinción) entre el valor pragmático de atenuación y el valor semántico de aproximación o vaguedad lingüística en las partículas como y como que del español chileno. En segundo lugar, nos proponemos describir aquellas situaciones que llevan a los hablantes chilenos a aproximar sus discursos por medio de como y como que; y, en tercer lugar, nos proponemos estudiar las causas y motivaciones de por qué se atenúa mediante estas partículas.

Para alcanzar estos objetivos, partimos de dos hipótesis: (1) que el carácter aproximador de como corresponde a un valor semántico, desde el cual han derivado nuevas funciones pragmático-discursivas (Mihatsch, 2009, 2010); y (2) que los aproximadores no son en sí mismos atenuadores, sino que adquieren esta función en determinadas situaciones (Llopis y Martínez, 2018).

En relación con el tratamiento de las formas como y como que, ha llamado nuestra atención que en los estudios que han buscado identificar las funciones asociadas a estas partículas, se refieren en algunos casos al marcador como como (Mihatsch, 2009, 2010; Holmvik, 2011; Jørgensen, 2011; Mondaca, 2017), y en otros casos como como (que) (Panussis, 2016; Panussis y San Martín, 2017). Creemos que estas maneras de referirlo sugieren que la conjunción que puede o no estar presente, y dan a entender que esta última tiene uso optativo y que como que podría considerarse una variante de como que quedaría a elección del hablante. Al verlo de esta forma, ambas partículas —como y como que— serían intercambiables en el discurso. Sin embargo, según hemos podido observar, el uso de una forma u otra parece depender de aspectos semánticos, pragmáticos y también sintácticos. Así, en nuestro estudio nos referiremos a ellas como partículas diferentes y trataremos de establecer las diferencias en cuanto a su uso.

Para concretar los objetivos planteados en este estudio, analizamos un corpus de 24 entrevistas sociolingüísticas, que forman parte del corpus recopilado en el Proyecto El voseo en Chile: Un cambio lingüístico en desarrollo. Aspectos internos y externos de la variación. En ellas hemos identificado aquellos contextos que dan cuenta del uso de como y como que como partículas aproximadoras en una muestra de habla que considera las cuatro macrozonas geográficas del país, definidas por Wagner (1998, 2004) en el Atlas lingüístico y etnográfico de Chile.

Hasta ahora, como ya hemos señalado, existe un número reducido de estudios enfocados en analizar el uso de la partícula como (y como que) en el español de Chile; y estos, a su vez, en su mayoría se han caracterizado por centrar sus análisis en el habla de Santiago, capital del país, de modo que no se han considerado otras zonas (Jørgensen, 2011; Panussis, 2016; Panussis y San Martín, 2017). Así, en este estudio se realiza un acercamiento a otras zonas del país, con el fin de poder extraer conclusiones acerca del uso aproximador y atenuador de como y como que que puedan generalizarse para el habla chilena.

En los apartados que siguen, primero, realizaremos una revisión de los fundamentos teóricos que guían nuestro estudio. Posteriormente, expondremos las características particulares del corpus de análisis utilizado y cuestiones metodológicas que nos ayudarán a responder los objetivos planteados. Luego, expondremos los resultados obtenidos a través del análisis para, finalmente, reflexionar sobre las conclusiones y las posibilidades de ampliación de este estudio.

2. El valor semántico aproximador de como y como que

Ya anunciábamos que, en la actualidad, diversos son los estudios que han dado cuenta de la polifuncionalidad de la partícula como en el discurso oral (Holmvik, 2011; Jørgensen, 2011; Panussis, 2016; Mondaca, 2017; Panussis y San Martín, 2017; entre otros). El valor semántico de estas partículas en una de sus acepciones es la aproximación, valor que marca un uso semánticamente impreciso de una expresión léxica, y que afecta las condiciones de veracidad de la proposición (Mihatsch, 2009).

Etimológicamente, la partícula discursiva como proviene del latín quomŏdo, que significa la manera en que. Sin embargo, con el paso del tiempo ese significado ha ido variando y generando una polisemia. Entre otros valores de su polisemia, hoy reconocemos que uno de ellos es la aproximación. Por su parte, el origen del significado aproximador de esta palabra tiene relación con su función comparativa (Mihatsch, 2009; 2010; Kornfeld, 2013); esta, a su vez, derivó de una anterior función adverbial y se convirtió en conjunción al unir entre sí dos o más términos de una comparación (Acín, 2001).

De acuerdo con la propuesta de Lakoff (1973), como constituiría un hedge, esto es, una partícula que expresa borrosidad, difuminación del significado. Así, los aproximadores son partículas que permiten flexibilizar los significados léxicos de aquellos elementos a los que modifican (Mihatsch, 2010), y permiten formular enunciados difusos, es decir, que no se le puede atribuir un valor de verdad o falsedad a la predicación que realizan (Pardo, 2019; Albelda y Briz, en prensa). En relación con este último punto, Llopis y Martínez (2018, p. 1034) establecen que los aproximadores[2] “manifiestan que el contenido al que afectan no se adecua completamente a los cánones de precisión y claridad”, de modo que operan como marcas que indican que lo que se dice “solo es cierto de forma aproximada” [3].

Así, si un hablante, bien por falta de disponibilidad léxica o de habilidad, no tiene acceso a las palabras precisas o, bien por una intención estratégica, no quiere ser tajante, puede emplear un elemento semánticamente similar acompañado del aproximador como (Mihatsch, 2009). Ello muestra que el hablante no se responsabiliza de aplicar el predicado emitido en toda su intención léxica o en toda su identidad semántica (Puga, 1997; Montecino, 2004), lo que permite ver cómo el empleo del aproximador como puede adquirir una función de atenuante pragmático.

En su uso comparativo, el cual dio origen a su valor semántico aproximador, como es una partícula que permite introducir tanto comparación ecuativa como comparación de similitud (Mihatsch, 2009; 2010). La comparación ecuativa es aquella que “establece una identidad de grado o de cantidad y, por ende, una comparación unidimensional basada en una escala” (1), mientras que la comparación de similitud “expresa una igualdad —o más bien una similaridad global— del modo de ser de procesos o identidades” (2) (Mihatsch, 2010, p. 179).

En 1) podemos observar que como establece una igualdad de grado, en tanto ambas cualidades están al mismo nivel y los dos elementos de la comparación se encuentran explícitos. En 2) existe una relación de similaridad entre dos referentes, donde como actúa como marcador de comparación (Mihatsch, 2010). El valor aproximador de como proviene de este segundo tipo de comparación (Mihatsch, 2009; 2010) (3):

En este último ejemplo se puede observar que como introduce una aproximación a una similaridad global, es decir, el área de comunicación, informática sería un campo que guarda una similitud aproximada con el área específica a la que se busca hacer referencia la hablante, pero no hay otro elemento explícito con el que se compare. Los ejemplos 2) y 3), entonces, dan cuenta de lo planteado por Mihatsch (2010, p. 177) al establecer que, tanto en español como en otras lenguas, “los marcadores de comparación que establecen una relación de similaridad entre dos referentes o contextos también se utilizan como marcadores aproximativos”.

A la luz de esto, concordamos con que el uso aproximador de como proviene de la comparación de similitud, la que, a diferencia de la comparación ecuativa, donde existe relación de igualdad entre dos valores de una escala, nunca es perfecta, sino siempre aproximada (Mihatsch, 2009), en tanto los valores comparados no están al mismo nivel. Así, la función aproximadora de como se basa en la similitud conceptual entre la expresión modificada y el concepto objetivo (Mihatsch, 2009).

En relación con algunas características gramaticales de la partícula aproximadora como, se puede establecer que esta opera a nivel proposicional y que posee un significado procedimental (Mihatsch, 2009). Además de estas características, en el plano sintáctico, se ha dado cuenta de que como tiene un alcance variable relativamente reducido, pero determinable (Mihatsch, 2009). Así, como es un modificador que tiene movilidad posicional, aunque en su uso aproximador se mantienen las propiedades distribucionales de su construcción original como elemento comparativo (Mihatsch, 2010). Finalmente, en su papel de aproximador, como se presenta mayormente ante sintagmas nominales, adjetivos, sintagmas preposicionales y participios; y, en menor medida, ante adverbios, otras formas verbales y oraciones completas (Mihatsch, 2010).

En cuanto a como que, partícula a la que aún no nos habíamos referido, debemos señalar que esta construcción ha llamado la atención de diversos autores que han estudiado las funciones de como (Panusis, 2016; Mondaca, 2017; Panussis y San Martín, 2017; entre otros). Sin embargo, solo han sido tratadas como partículas aproximadoras diferenciadas en el trabajo de Jiménez y Flores-Ferrán (2018). Aunque se ha propuesto que tanto como como como que compiten en contextos lingüísticos similares, que cumplen funciones discursivas similares, que expresan significados similares y que son muy utilizados por los hablantes, también se ha determinado que como es utilizado con mayor frecuencia que como que (Jiménez y Flores-Ferrán, 2018).

Más allá de su valor aproximador, la partícula como puede cumplir funciones que no solo afectan las condiciones de verdad de la proposición, sino que trascienden lo semántico, de modo que esta partícula hoy puede clasificarse como un marcador pragmático que contribuye al proceso de formulación de los enunciados y que ayuda al oyente a interpretar correctamente las inferencias (Mihatsch, 2009). Así, la aproximación semántica ha sido el punto de partida para otras funciones pragmático-discursivas derivadas del uso de como (Mihatsch, 2009, 2010).

Nos hemos referido hasta aquí al valor semántico aproximador como. En el siguiente apartado daremos cuenta de la relación entre las partículas como y como que y una de las funciones pragmáticas que ha sido identificada como la más frecuente (Panussis y San Martín, 2017): la atenuación.

3. El valor pragmático atenuador de como y como que

Son ya abundantes los trabajos en que se ha estudiado el uso atenuador de la partícula como (Puga, 1997; Briz, 1998, 2003, 2006; Holmvik, 2011; Jørgensen, 2011; Kornfeld, 2013; Panussis, 2016; Mondaca, 2017; Panussis y San Martín, 2017) derivado de su valor semántico aproximador (Mihatsch, 2010; Kornfeld, 2013). Sin embargo, como ya ha señalado la bibliografía, no todos los aproximadores “son formas atenuantes, sino que adquieren funciones atenuantes en ciertos contextos” (Llopis y Martínez, 2018 p. 129-130).

La función atenuante “responde a la necesidad del hombre de protegerse frente a todo aquello que puede representar una amenaza” (Puga, 1997, p. 21). Se ha considerado la función pragmática principal de como y como que y se ha establecido que bien puede actuar en el discurso de forma independiente, es decir, como única función discursiva, o bien puede hacerlo en conjunto con otras funciones asociadas a la partícula (Panussis y San Martín, 2017). Los atenuantes no son simples significados asociados a formas lingüísticas, sino estrategias que tienen una función concreta en la comunicación y cuyo uso solo se puede explicar desde la pragmática, es decir, contextualmente (Briz, 1998). De esta forma, la atenuación es concebida, en tanto categoría pragmática, como:

una operación lingüística de minimización de lo dicho y del punto de vista, que afecta, así pues, al valor intencional, a la fuerza ilocutiva, es decir, una operación vinculada a la actividad argumentativa y de “negociación” del acuerdo, que es el fin último de toda conversación (Briz, 2004, p. 68).

A la caracterización anterior es importante agregar que la atenuación implica aspectos relacionados con la efectividad y eficacia del discurso, con el acuerdo con o la aceptación del otro (distanciamiento lingüístico - acercamiento social) y con el cuidado de las relaciones interpersonales (Briz y Albelda, 2013). Es fundamental el contexto situacional a la hora de reconocer la atenuación. Por ello, para identificar esta categoría pragmática en el discurso se deben analizar tres factores: a) los rasgos situacionales, como el marco físico donde se realiza la entrevista o conversación, la relación de poder/ jerarquía entre los interlocutores, el grado de proximidad, conocimiento común compartido entre los interlocutores o el origen geográfico y cultural de los hablantes; b) el tipo de acto de habla y la fuerza ilocutiva y c) la implicación de las imágenes de los interlocutores en la interacción (Albelda, 2010).

Al tener en cuenta todo lo que implica la actividad atenuadora, como y como que caben dentro de las categorizaciones de atenuantes aproximadores (Prince et al., 1982) y de atenuantes semántico-pragmáticos (Briz, 1998, 2003, 2006). Ambas partículas modifican los elementos que les siguen en el discurso, por lo que afectan al contenido proposicional e indirectamente a la fuerza ilocutiva del acto de habla en el que se emplean, siempre que el contexto permita identificar actividad de la imagen. Así, los casos en los que como y como que cumplan una función atenuadora serán aquellos donde exista incidencia de la imagen.

En otro ámbito, al hablar de como y como que como tácticas o recursos lingüísticos de atenuación, sobre la base de lo planteado por Briz y Albelda (2013), podemos clasificar estas partículas dentro de los elementos que relativizan o indeterminan lo que se expresa. Ante esto, cabe señalar que se ha comprobado que los hablantes chilenos utilizan como y como que predominantemente en secuencias argumentativas, sobre todo cuando dan su opinión respecto de algo o cuando buscan la aprobación de su interlocutor (Panussis y San Martín, 2017), de modo que su empleo les ayuda a relativizar sus discursos como una forma de autoprotección ante lo que enuncian. Asimismo, como tácticas de atenuación, estas partículas constituirían aproximativos proposicionales, junto con otros elementos como algo, algo así o un poco, que constituyen modificadores externos que difuminan los significados (Briz, 1998; Briz y Albelda, 2013).

Para finalizar este apartado, consideramos importante mencionar que, en un estudio sobre el español de Argentina, se ha postulado que para que como se interprete de manera inequívoca como un marcador de atenuación, debe ir obligatoriamente acompañado de la conjunción que (Kornfeld,2013), planeamiento que buscaremos comprobar por medio de nuestro análisis para el español de Chile. En el siguiente apartado, revisaremos la composición del corpus y las directrices metodológicas que nos han servido de base para responder a los objetivos de este trabajo.

4. Corpus de análisis y metodología

Para analizar la expresión de la función pragmática de atenuación en los aproximadores como y como que hemos utilizado un corpus de 24 entrevistas sociolingüísticas. Estas entrevistas fueron recopiladas en el Proyecto El voseo en Chile: Un cambio lingüístico en desarrollo. Aspectos internos y externos de la variación[7]. Cada entrevista tiene una duración aproximada de una hora; la transcripción del corpus suma un total de 172.993 palabras.

Todos los informantes pertenecen al rango etario de 18 a 24 años y la distribución de la muestra se puede resumir de la siguiente manera: seis de los informantes provienen de la zona norte de Chile (Iquique), seis de la zona centro (Santiago), seis de la zona sur (Temuco) y seis de la zona sur austral (Coyhaique) —tres hombres y tres mujeres por cada zona—. Así, el análisis se ha realizado sobre una muestra de habla descentralizada que abarca todo el territorio chileno distribuido en las cuatro macrozonas geográficas definidas en el Atlas lingüístico y etnográfico de Chile (Wagner, 1998, 2004).

Para el análisis, finalmente, se han considerado aquellos contextos en los que hemos identificado un uso aproximador para las partículas como y como que. Así, hemos trabajado con 1011 casos de como y 709 de como que. Dado que nuestro objetivo ha sido centrarnos en la expresión del valor atenuante generado a partir del valor aproximador de estas partículas, debemos especificar aquí que no hemos considerado en el análisis —y por ende no se han incluido en el número de casos que hemos dado— los usos aproximadores de como vinculados con la retardación, la ejemplificación, la aproximación numérica y la introducción de discurso directo. No los abordaremos aquí, pues consideramos que se requiere un estudio más extenso donde tratar en profundidad cada uno de ellos; sin embargo, remitimos muy brevemente a dos de estos usos en las conclusiones de este trabajo.

Con el fin de determinar si efectivamente el uso aproximador de las partículas analizadas deriva, a su vez, en uno atenuador, nos hemos basado en los postulados de Briz y Albelda (2013). Así, hemos prestado atención al contexto interaccional concreto donde se emplean estos elementos y hemos tenido en cuenta que en toda atenuación interviene un segmento desencadenante o causante, un elemento o segmento atenuante y el segmento atenuado. En el ejemplo que mostramos a continuación (4), la conversación versa sobre el hecho de que el informante suspendió una asignatura en la universidad, de modo que se autoprotege cuando la entrevistadora le pregunta a qué se debió que suspendiera. En este ejemplo, se pueden delimitar claramente los segmentos que intervienen en el proceso de atenuación:

Entrevistadora: ¿Y por qué te lo echaste[8]? (elemento causante)

H6A4: (Risas) es que como estuve metido en otras cosas como que (elemento atenuante) perdí el interés por la vida de la U […] (elemento atenuado)

Del mismo modo, al momento de analizar los ejemplos extraídos, hemos considerado también que existen tres funciones atenuadoras: a) autoprotección, relacionada con la imagen propia del hablante —salvaguarda del yo—; b) prevención, vinculada tanto a la imagen del hablante como del oyente, en tanto se busca prevenir posibles daños a la imagen del otro; y c) reparación, relacionada con la imagen del oyente y del hablante, debido a que se busca reparar los daños causados a la imagen del otro (Briz y Estellés, 2010; Briz, 2011; Briz y Albelda, 2013; Albelda at al, 2014; Villalba, 2015). Los siguientes ejemplos ilustran cada una de las funciones atenuadoras[9]:

Entrevistador: Ah, no te dice a ti   

M2A4: No poh, no me lo dice a mí. No va y me lo dice a mí, no poh. Le dice a mi papá y mi papá como tiene la personalidad más fuerte y como lo huevea tanto, como que el hueón explota y se la agarra conmigo y ahí queda la cagá... ahí queda la cagá

H: mi padre me riñe porque le da la gana

P: hombre/ alguna cosita harás que no está bien[10]

J: ¿conclusiones de la parte actora?

A: no/ Señoría/ le faltaba la pericial

J: ay perdón sí [sí sí]

A:                   [discú]lpeme/ Seño[ría]

J:                                                   [sí] sí/ no no si tiene razón// lo he anotado/  efectivamente/// ¿pericial médica?[11]

Finalmente, dado que nuestro corpus es de entrevistas sociolingüísticas, hemos de considerar también que, en la entrevista semidirigida, la atenuación se da principalmente con el fin de cuidar la propia imagen (Albelda, 2004, 2008, 2010, 2012). En nuestro corpus esto es relevante debido a que, en la mayoría de las entrevistas que hemos utilizado, la relación entre entrevistador e informante es asimétrica, ya sea porque son desconocidos o porque existen diferencias significativas de edad o de nivel de instrucción entre ambos, condiciones que creemos que favorecen el hecho de que los informantes busquen autoprotegerse y eviten amenazar la imagen de sus entrevistadores.

5. Resultados

A través del análisis realizado, primero en relación con como, hemos podido determinar que esta partícula es un elemento constantemente utilizado por los hablantes chilenos para aproximar sus discursos. Esta partícula, como hemos establecido anteriormente, modifica al elemento que le sigue en los enunciados, difuminando su significado. Ahora bien, en cuanto a como que, nuestro análisis nos ha permitido observar que su empleo parece ser un indicador constante de atenuación y que el valor aproximador de como parece perderse para dar paso a uno principalmente atenuante cuando se combina con la conjunción que. No obstante, también hemos identificado casos en los que los límites entre como y como que y sus funciones aproximativas y atenuadores no son del todo claros, por lo que creemos que como que hoy se encuentra en un estado de transición en el que su valor aproximador pasaría a ser uno predominantemente atenuador.

Veamos, en primer lugar, cuál es la frecuencia de uso de como y como que como partículas aproximadoras y atenuadoras en el corpus de trabajo. Como ya hemos indicado, hemos analizado 1.011 (100%) casos para como. En todos ellos se ha identificado su uso aproximador. Nuestros resultados reflejan que, en un 71% de los casos, como es empleado por los hablantes como partícula difuminadora de significado, pero sin que estos usos impliquen una actividad atenuadora, esto es, sin que exista un riesgo de amenaza a la imagen de los hablantes. No obstante, nuestros resultados también nos permiten señalar que, en un 29% de los casos, este uso aproximador adquiere una función atenuante, en tanto es posible identificar contextualmente motivaciones para que los hablantes busquen autoprotegerse. Así, estos resultados nos permiten indicar que como se presenta con mayor frecuencia en el discurso como un recurso aproximador que permite a los hablantes difuminar sus ideas sin que con ello se busque la protección de la imagen; sin embargo, esta partícula adquiere una función pragmática atenuadora en aquellos contextos donde es posible identificar una necesidad del hablante por autoprotegerse. La siguiente tabla resume la frecuencia de empleo de como según su uso como aproximador semántico y atenuador pragmático.

Tabla 1. Frecuencia de uso como.

 

Frecuencia

Porcentaje

Como aproximador

721

71%

Como aproximador atenuador

290

29%

Total

1011

100%

Fuente: elaboración propia

Para la partícula como que, por su parte, hemos analizado un total de 709 casos. Un 99% de estos casos revela que la locución como que tiene un carácter predominantemente atenuador. Sin embargo, aunque solo en casos puntuales, también pudimos identificar usos aproximadores de esta partícula que no implican actividad de la imagen (1%), es decir, que no responden a una necesidad de los hablantes de autoprotegerse ante una posible amenaza. Nuestros resultados, así, como mencionábamos previamente, nos llevan a postular que la locución como que está en un proceso de cambio, donde su carácter de aproximador semántico parece estar dando paso a un uso constantemente atenuador. La siguiente tabla resume la frecuencia de empleo de como que según su uso como atenuador pragmático y aproximador semántico.

Tabla 2. Frecuencia de uso como que

 

Frecuencia

Porcentaje

Como que atenuador

700

99%

Como que aproximador

9

1%

Total

709

100%

Fuente: elaboración propia

5.1 Como: de aproximador a atenuador

A través del análisis, hemos comprobado que, como partícula atenuadora semántico-pragmática, como modifica semánticamente los elementos que les siguen en la proposición —difumina sus significados— e, indirectamente, atenúa en aquellos casos donde los hablantes buscan salvaguardar su propia imagen. Así, podemos comprobar que como es un aproximador que adquiere una función atenuante en determinados contextos. En el análisis que hemos realizado no hemos encontrado casos donde los hablantes empleen como o como que con el fin de proteger la imagen su interlocutor, sino siempre la propia, de modo que concordamos con Albelda (2004, 2008, 2010, 2012) quien establece que la autoprotección es predominante en la entrevista semidirigida.

A continuación, presentamos primero algunos ejemplos[12] que dan cuenta del uso de como como un elemento aproximador para, posteriormente, mostrar también algunos casos que dan cuenta de un uso también aproximador, en tanto valor semántico, pero sobre el cual se identifica una función atenuadora. Con el fin de ilustrar de mejor forma lo que hemos planteado anteriormente, nos permitiremos contextualizar, brevemente, cada uno de los ejemplos que presentamos, ya que, como hemos señalado en apartados anteriores, la atenuación es una categoría pragmática identificable solo mediante el contexto (Briz, 1998; Briz y Albelda, 2013).

 

Entrevistador: Sí, es que estoy haciendo dos cosas la pedagogía y la licenciatura

H4A1: ¿En serio? Ay, qué motivado, la vai a pasar bomba[13] haciendo las dos hueás al mismo tiempo

Entrevistador: Sí, eso es bacán

H4A1: No, a mí no me da el cuero[14] pa' dos carreras con una no más tengo una amiga que es como una especie de prima porque son como amigos de mis viejos de toda la vida y tienen una hija y está sacando Comercial e Industrial al mismo tiempo en la Chile […]

 

H2A3: Eh, a ver, tuve-no sé cómo se llama el ramo. Desarrollo-Desarrollo le decíamos. "Desarrollo y Evaluación" y "teatro y Diversidad"

Entrevistadora: ¿Teatro?

H2A3: Sí, teatro infantil

Entrevistadora: ¿Y eso?

H2A3: Eh, es que son enfocados en, no sé poh, en fábulas, cuentos y formas de enseñar a los niños como artísticamente, entonces, pa' saber algo de teatro

 

En 8) la conversación entre entrevistador e informante versa sobre que el primero se encuentra cursando dos carreras a la vez. Ante esto el informante comenta que alguien que él conoce también está cursando dos carreras universitarias a la vez y que él no cree poder ser capaz de hacer tal cosa. La relación que él mantiene con la persona que está cursando dos carreras al mismo tiempo es casi familiar, por lo que, por medio de como (uso que, a su vez, se da en conjunto con la locución aproximadora una especie de), establece así que la relación que tienen es similar a la que tendrían unos primos. Lo mismo ocurre con la aproximación que realiza al hablar de la relación que mantienen sus padres con los de la persona a la que se está refiriendo, donde señala que no es una relación de amistad, sino de algo similar, lo que en Chile se podría interpretar como conocidos de toda la vida.

En el ejemplo 9) el informante habla acerca de una asignatura sobre teatro que tuvo que cursar en la universidad, mientras se formaba como pedagogo. Así, le explica a la entrevistadora, de forma general, de qué se trata esta asignatura y plantea que está enfocada en lo que podría considerarse una forma artística de enseñar. Por medio de como, entonces, el hablante no aplica la carga semántica completa del adverbio artísticamente, sino que deja en claro que se trata de una aproximación de significado.

Los ejemplos anteriores nos permiten corroborar que como permite aproximar, es decir, expresar una idea que sería similar por proximidad a lo que se está diciendo. Los usos que hemos ilustrado no reflejan un uso pragmático atenuador debido a que la imagen de los hablantes no se ve comprometida en ningún momento. En los ejemplos no existe una situación de amenaza que motive a los informantes a autoprotegerse, de modo que el uso de como se limita a su carácter de aproximador.

Sin embargo, como ya hemos adelantado, existen usos de como en los que tras el valor aproximador de la partícula se puede interpretar, además, uno atenuador. En 10) la conversación gira en torno a que el informante ha tomado la decisión de cambiarse de universidad y le comenta a la entrevistadora que no cree que esto represente un mayor problema emocional para él. Sin embargo, luego sí señala que la situación le pone nervioso y que le produce una sensación rara, es decir que, aunque piensa que empezar de nuevo no es un tema complejo para él, sigue sintiendo algo de inseguridad.

 

H4A2: Si eso era lo que más-yo sentía que era lo que más me arriesgaba a no tomar la decisión. Como los amigos que tenía allá. Sentía-porque ya eran mis hermanos prácticamente.

Entrevistadora: ¿Pero los seguíh viendo o no?

H4A2: Sí poh, los sigo viendo. O sea, ya no los veo como hace dos meses más o menos, pero siempre estamos en contacto. Siempre hay contacto, hay harto cariño, hay harta como lazos fuertes.

Entrevistadora: Sí, porque igual estuvieron tres años poh. Tres años. Y ahora vai a tener que entrar de nuevo a primero.

H4A2: Siempre hay que empezar de nuevo, uno siempre puede volver a empezar, eso no me complica (desencadenante). Igual me pone como (atenuante) nervioso (atenuado). Siempre empezar algo nuevo (desencadenante) da como-(atenuante) una sensación rara (atenuado), pero me gusta.

 

En el ejemplo, podemos observar que tanto el adjetivo nervioso como la frase nominal una sensación rara han sido, primero, aproximados por medio de como, en tanto no se aplica el significado semántico completo, y atenuados pragmáticamente, debido a que a través de ellos el hablante salvaguarda su imagen ante el riesgo que implica reconocer y asumir ante su entrevistadora que efectivamente se siente nervioso e inseguro con respecto a su decisión.

 

Entrevistadora: O sea, tú te poníh en el lugar, tu hija pololeando

H6A5: Claro, echamos talla de repente con eso. Yo digo, “Va a pololear recién a los dieciocho”, le digo yo, y la […] dice, “No, a los diez”, dice ella, “va a estar pololiando” (risas).

Entrevistadora: (risas) Ahí va a depender de los papás igual poh.

H6A5: Sí poh, sí. No, pero-

Entrevistadora: O sea, si ustedes le dan tanta libertad, no sé poh. ¿Pero tú vas a ser estricto como papá o no? (segmento desencadenante)

H6A5: Mmm, yo creo que sí. Es que tengo como (atenuante) una personalidad así media- (segmento atenuado)

Entrevistadora: Estricta (desencadenante)

H6A5: Claro, como (atenuante) medio programado, sistematizado (segmento atenuado), ¿cachai?, entonces, un poquito medio-

Entrevistadora: ¿Más tradicional?

H6A5: Sí poh, sí

Entrevistadora: Ah. A ti te criaron así (segmento desencadenante)

H6A5: Sí, sí. De hecho, tan apegado a mis papás no soy, porque vivo solo igual hace tiempo, pero como que (atenuante) me crié-(segmento atenuado) quizás ese poquito que me agarraron, me-seguí siempre así, de la misma línea, como (atenuante) de la vieja escuela (segmento atenuado).

 

En 11), por su parte, la conversación versa acerca de que el informante va a ser padre de una niña y cree que, por su personalidad, será un padre estricto. Podemos observar que el informante aproxima elementos que lo harían ver como alguien estricto ante su entrevistadora a través del empleo de como (como una personalidad así media-, como medio programado, sistematizado, como de la vieja escuela”). Además, los dos primeros usos de como que hace van acompañados de otro aproximador: medio(a), que permite identificar una difuminación de significado aún mayor a lo que está diciendo. En estos usos de como hemos podido observar que el hablante no solo aproxima su discurso para no aplicar toda la carga semántica de los elementos modificados, sino también para proteger su imagen ante las cualidades que menciona, que pueden considerarse anticuadas en la sociedad actual. En este ejemplo, asimismo podemos ver que el hablante utiliza la partícula como que (“como que me crié-”) seguida, además, de una autointerrupción para reformular su discurso. En este uso de como que no hemos identificado un valor aproximador, sino solo uno pragmático atenuador. A través de él no se introduce una aproximación a una justificación, sino una justificación propiamente tal que contribuye a proteger su imagen, pero que no aproxima.

De esta manera, hemos podido demostrar que, en algunos casos, la función aproximadora opera de manera aislada, mientras que, en otros, este uso aproximador deriva en uno atenuador. Así, el paso de aproximador a atenuador se observa en aquellos casos donde, además de la difuminación de significado que el hablante realiza por medio de como, contextualmente se puede identificar la existencia de un riesgo de amenaza a su imagen, riesgo que la difuminación de significado le ayuda a contrarrestar.

Así, como, además de modificar semánticamente la proposición, también modaliza el enunciado pragmáticamente. En el siguiente apartado, nos referiremos específicamente al uso de como que, forma que, como ya hemos adelantado, parece haber comenzado a distanciarse del valor aproximador base de como.

5.2 Como que: de aproximador a atenuador. ¿Un cambio en proceso?

En relación con la partícula como que, nuestros resultados nos permiten establecer que esta locución tiene un uso predominantemente atenuador, a diferencia de como que siempre refleja su función aproximadora independientemente de que también adquiera una función atenuante. Postulamos que, al añadir la partícula que, el valor aproximador de como parece perderse, dando paso a un valor principalmente pragmático: el atenuador. Veamos algunos ejemplos:

 

H6A6: ¿Hai ido pa' allá o no?

Entrevistadora: Sí.

H6A6: Se junta caleta[15] de gente así.

Entrevistadora: Sí, caleta y en el verano andan hartos hippies allá.

H6A6: Anda de todo en realidad, de todo así. La última vez conocí a un loco de La Legua así y la hueá era terrible así como-hablaba (desencadenante) así como (atenuante) sha[16] igual (segmento atenuado). El loco era súper buena tela, hueón.

Entrevistadora: Qué bacán (segmento desencadenante).

H6A6: Como que (atenuante) igual me saqué todo el estigma de los locos de allá así (segmento atenuado)

Entrevistadora: Sí poh, como el prejuicio que uno tiene a veces-

 

En 12) el informante comenta que conoció a alguien que proviene de La Legua, un barrio estigmatizado socialmente de la Comuna de San Joaquín, Región Metropolitana de Chile. El informante señala que, a pesar de tener características de una persona considerada flaite[17] en Chile, es una buena persona. Al establecer esto, atenúa su discurso por medio de como que cuando reconoce que él también compartía el prejuicio común de los chilenos, dando a entender que, antes de conocer a esta persona, él tenía la misma imagen de la gente que vive en este barrio. La atenuación, en este caso, se ve reforzada, además, a través de la partícula igual. En el español de Chile, igual ha sido definido como un marcador que, al emplearse junto a como que acentúa el valor atenuante del elemento modificado por esta partícula (San Martín, 2004-2005; Panussis y San Martín, 2017).

Además, en el ejemplo, también se observa un uso aproximador de como (“como sha igual”). En este caso, la función de como es introducir una aproximación a la forma de hablar generalizada de los flaites, en Chile (ch [t̠͡ʃ] pronunciada como sh [ʃ]). Este uso de como también se refleja una función atenuante, debido a que el hablante busca proteger su imagen ante la entrevistadora al dejar entrever su juicio hacia la manera de hablar a la que se refiere.

 

M2A5: Entonces, hay que estar todo el rato pendiente o se despierta en la noche y habla y habla y hay que estarle conversando o se despierta muy temprano, como a las seis de la mañana todos los días

Entrevistador: ¿En serio?

M2A5: Sí (desencadenante), entonces, igual es ta-eeh-como que (atenuante) es gastador[18] (segmento atenuado) el convivir con ella todos los días

Entrevistador: Ya

M2A5: Uno se agota. Bueno, yo me agoto todos los días, porque mi pieza queda al frente de la de ella, entonces, ella me despierta todos los días a las seis de la mañana, hasta el día domingo. El día domingo, que uno quiere descansar y dormir, yo a las seis de la mañana ya estoy despierta

 

En 13) entrevistadora e informante conversan acerca de la responsabilidad que tienen esta última y su familia al ser quienes cuidan de su abuela materna, quien padece varias enfermedades. En el ejemplo, podemos ver cómo la informante le comenta a la entrevistadora lo agotador que es para ella cuidar de su abuela. En este caso, estamos ante un uso atenuador de como que, debido a que la hablante no busca establecer una relación de proximidad entre su pensamiento y el adjetivo [des]gastador (introducido mediante el verbo copulativo ser), sino que busca proteger su imagen antes de señalar lo desgastador que es para ella cuidar a su abuela de forma permanente. La atenuación se debe a que, socialmente, cuidar de un familiar cercano que lo necesita, como ocurre en este caso, no debería considerarse una carga.

 

Entrevistadora: Demás poh, tampoco los iba a tener a ustedes viviendo en una casa llena de conflictos poh. Qué difícil. ¿Y tú cómo te llevai hoy en día con tu papá?

M7A6: No tenemos contacto prácticamente (desencadenante). O sea, de repente, por lo menos el año pasado cuando estuve en Temuco me llamó dos vec-una vez creo que me llamó. A él como que (atenuante) no le interesa (segmento atenuado). Como que (atenuante) se separó de mi mamá (segmento atenuado) y como que (atenuante) se separó de todos nosotros (segmento atenuado). Como que (atenuante) se olvidó que tenía hijos (segmento atenuado).

 

En 14), la conversación se desarrolla en torno a la situación que vivió la informante cuando sus padres se separaron. La entrevistadora le pregunta cómo es su relación con su padre hoy en día y ella atenúa su discurso al referirse a la manera en que su padre ha actuado con su familia luego de la separación. A través de como que, la informante protege su imagen, evitando responsabilidad en los juicios que establece en relación con un tercero que no está presente en la interacción.

Hemos revisado hasta aquí ejemplos donde se puede ver claramente el valor atenuador de la partícula como que. No obstante, como hemos señalado previamente en este trabajo, creemos que como que se encuentra en una fase de transición. Esta transición consistiría en pasar de ser un aproximador que puede presentar predominantemente una función atenuadora a ser un marcador cuya función principal sea la atenuación pragmática.

Como ya hemos mencionado, en casos puntuales dentro de nuestro corpus de análisis hemos encontrado situaciones en las que aún pueden observarse solo rasgos aproximadores y no atenuadores en el uso de como que; sin embargo, recalcamos que son casos muy puntuales (1%). Veamos un ejemplo:

 

Entrevistadora: Qué buena. Y ahí, ¿ella duerme dónde?

M6A1: Duerme aquí en-es que donde tiene ese negocio[19] de las-aquí cerca del estadio, ahí ella arrienda una casa.

Entrevistadora: Ya.

M6A1: Entonces, como que el negocio es la prolongación la casa y ahí, ahí ella duerme y todo. ¿Viste? Ahí vive con mi cuñada, el hijo de mi cuñada y su hijo chico.

 

En 15) la conversación versa sobre el lugar en que vive la suegra de la informante, quien le ha facilitado una casa para que comparta con su pareja. En este ejemplo, como que incide sobre toda la proposición que introduce, el valor aproximador está en la descripción del negocio, que se asocia, vagamente, con un lugar físico. Como que sirve a la hablante como mecanismo para no aplicar la carga semántica completa de la oración, dejando entrever la similitud existente entre la manera en que, como edificación, se vincula el negocio a la casa y lo que sería la expansión de un lugar físico. Este es un caso en el que como que aproximador no se vincula con una función atenuante, ya que no existen motivaciones en el contexto interaccional concreto para que la informante necesite salvaguardar su imagen.

En resumen, hasta aquí nuestro análisis nos ha permitido responder a nuestro principal objetivo: determinar la relación (y distinción) entre la aproximación y la atenuación por medio de como y de como que en el español de Chile. Así, como, por una parte, es una partícula cuyo valor aproximador puede presentarse de manera independiente. Por otra, y en aquellos contextos donde el hablante requiera autoproteger su imagen, el valor aproximador de como deriva en uno atenuador. En relación con como que, hemos podido determinar que su uso se vincula principalmente con la atenuación, aunque existen casos muy reducidos en los que se identifica su función aproximadora.

5.3. ¿Qué se aproxima y qué se atenúa por medio de como y de como que?

El análisis que hemos realizado, además de permitirnos visualizar la relación (y distinción) entre la aproximación y la atenuación a través de como y de como que, también nos ha permitido observar cuáles son aquellos contextos lingüísticos en que los hablantes chilenos suelen aproximar y atenuar. Proponemos, genéricamente, algunas clasificaciones que dan cuenta de aquellos contextos frecuentes. Cabe señalar en este punto que Jiménez y Flores-Ferrán (2018) indican la disminución del grado de compromiso y la falta de información exacta como contextos discursivos en los que se emplean los aproximadores como y como que. Así, sobre la base de lo planteado por estas autoras y recurriendo a ejemplos, proponemos una clasificación de elementos que suelen ser aproximados por lo hablantes chilenos. En estos ejemplos no existe incidencia de la imagen, pues no hay un riesgo ante el cual los hablantes requieran autoprotegerse:

1. Explicaciones generalizadas donde la especificidad de los términos a los que remiten los hablantes no es imprescindible para los propósitos de la comunicación:

H7A2: Sí, miré las mallas curriculares, o sea, esas ¿cómo se llaman? Los

Entrevistador: La malla curricular

H7A2: Sí, y me gustó. Te pasan botánica, te pasan toda la cuestión

Entrevistador: ¿Y qué es botánica?

H7A2: Eso es botánica poh como las cuestiones de la tierra […]

2. Generalizaciones a causa de la falta de las palabras técnicas o específicas adecuadas para el contexto.

Entrevistador: Trabaja en Ripley. ¿Qué hace en Ripley?

M4A4: Ah, es que no sé muy bien, pero trabaja como en el área de comunicación, informática, en fin […]

3. Ejemplificaciones generalizadas sobre actividades específicas (por ejemplo, al referirse a su trabajo) o acciones generalizadas en las que no desean aplicar la carga semántica completa de los verbos que se emplean.

M4A6: En general reviso que la gente se esté portando bien. Como que si hay una ofensa o algo, yo reviso si hay que penalizarlo o hay que sacarlo de su sitio o si en realidad fue por molestar.

M4A4: No veíh que podíh como ocultar a la gente que no te vea conectá', ya, hice eso porque me escribe en los estados, no.

4. Cualidades en las que no desean aplicar la carga semántica completa de los adjetivos que utilizan.

M6A2: Porque ella es como rubia, es como curvilínea, es como bien pelolais[20].

5. Indicaciones aproximadas de direcciones.

M6A1: Cerca de la plaza de armas

Entrevistadora: Ah, ya. Queda-¿Claro Solar? ¿Tú te vas por-?

M6A1: Sí, Claro Solar, Varas, Bello, hacia allá

Entrevistadora: Ah, ya, ya, ya, ya

M6A1: Como yendo hacia Caupolicán

Entrevistadora: Ya, sí, sí ya me ubiqué

A través de estos ejemplos hemos podido dar cuenta de aquellos elementos del discurso que suelen ser aproximados semánticamente por medio de como y de como que. Sin embargo, como ya hemos establecido, nuestro análisis también nos ha permitido observar que existen situaciones recurrentes en las que los hablantes chilenos se ven motivados a atenuar sus discursos a través de como y de como que y, con ello, a salvaguardar su propia imagen. Así, postulamos cuatro grandes contextos donde la atenuación es constantemente identificada:

1. Al reconocer cualidades o pensamientos de sí mismos que su interlocutor podría considerar negativos.

M6A2: Y por eso me da pánico que se muera[21]. Yo creo que por eso es el hecho de cuidarlo tanto, porque siempre he pensado que si él se llega a morir, yo voy a pescar las cuatro pilchas que tengo y me voy a ir, porque no es sana la convivencia que tengo con, con mis papás. Con mi hermana tampoco, entonces como que igual, suena duro y feo decirlo, pero siempre he pensado lo mismo.

2. Al emitir juicios, acusaciones u opiniones sobre terceros que no están presentes en la interacción.

H6A4: Ella los lunes y nosotros los jueves, o sea, como que le hacemos dos tercios de la pega[22] a él poh, ¿cachái?

3. Al afirmar cosas de las que no están plenamente seguros, con el fin de evitar responsabilidades sobre lo que dicen.

Entrevistadora: Pero ¿tú podíh trabajar instalándolos?, ¿tú no estaríai haciendo un trabajo ilegal o sí?

H2A1: Mmm, no sé muy bien, pero yo creo que no

Entrevistadora: ¿No? ¿Que no qué?

H2A1: Que no sería como ilegal hacer ese trabajo

Entrevistadora: No, ¿cierto?

H2A1: No

4. Al mencionar cualidades positivas de sí mismos o de familiares cercanos, con el fin evitar autoalabanzas.

M7A4: No, igual que-no, mi sobrino, por ejemplo, el hijo de mi hermano mayor-este-la otra vez le fueron a medir el coeficiente intelectual, porque es como superdotado

Entrevistadora: No lesees.

6. Conclusiones

Al realizar este estudio hemos comprobado nuevamente la polifuncionalidad de la partícula como. Nos hemos centrado en como y en como que con el fin de analizarlos en su calidad de elementos semánticamente aproximadores que pueden adquirir en usos atenuadores identificables solo pragmáticamente.

En relación con como, no todos los usos aproximadores de esta partícula implican una actividad de la imagen, sino solo aquellos en los que los hablantes buscan autoprotegerse ante un posible acto amenazador. Así, podemos confirmar que como es un elemento cuya función base es la aproximación y que la atenuación es una función pragmática que subyace, en determinados contextos, al a su valor aproximador (Llopis y Martínez, 2018).

Ahora bien, al hablar de como que, podemos concluir que no estamos ante un uso de la partícula cuya función principal sea la aproximación, sino que su uso es predominantemente atenuador. Así, nuestro análisis nos ha permitido determinar que como que es una locución muy frecuentemente utilizada por los hablantes chilenos para mitigar su discurso, para autoprotegerse. Decimos que su uso es predominantemente —y no siempre— atenuador, debido a que, en nuestro corpus, aunque solo casos puntuales, hemos encontrado casos de como que en los que se identifica un uso aproximador sin que adquiera un valor atenuador. Por esta razón, creemos que se requieren más estudios donde se establezcan criterios que permitieran establecer los límites entre el uso aproximador y atenuante de esta partícula.

Por ahora, nos permitimos postular que, en el español de Chile, el uso de como que es un indicador constante de atenuación. No obstante, dado que hemos podido determinar que el uso aproximador de como puede adquirir también una función atenuadora en determinados contextos, debemos señalar también que nuestros resultados no concuerdan con lo planteado por Kornfeld (2013), quien establece que, para que sea identificable su valor atenuador, como siempre debe ir acompañado de la conjunción que.

Los resultados que hemos obtenido, por otra parte, nos han permitido postular también algunos contextos generales en los que los hablantes chilenos suelen aproximar sus discursos a través de como y, en casos puntuales, de como que. Así, estos contextos son aquellos donde se introducen a) explicaciones generalizadas donde la especificidad de los términos utilizados no es imprescindible para los propósitos de la comunicación, b) generalizaciones a causa de la falta de las palabras técnicas o específicas adecuadas para el contexto, c) ideas que funcionan a modo de ejemplo en secuencias explicativas, d) acciones o cualidades generalizadas y e) direcciones.

En relación con los contextos que motivan a los hablantes chilenos a atenuar sus discursos mediante como y como que, hemos determinado cuatro situaciones recurrentes. La primera se relaciona con aquellos momentos cuando el hablante reconoce poseer cualidades o comparte pensamientos que tiene sobre sí mismo que pueden causar una impresión negativa en su interlocutor. La segunda, se vincula con la emisión de juicios, acusaciones u opiniones sobre terceros que no están presentes en la interacción. La tercera dice relación con el hecho de realizar afirmaciones sobre temas de las que no se tiene seguridad absoluta, con el fin de evitar responsabilidades sobre lo que se dice. Finalmente, la cuarta se relaciona con hacer referencia a cualidades positivas de sí mismos o de familiares/ amigos cercanos, con el fin evitar autoalabanzas.

En cuanto al género discursivo con el que hemos trabajado, en nuestro análisis no hemos encontrado casos donde los hablantes empleen como o como que con el fin de proteger la imagen de su interlocutor, sino siempre para salvaguardar la propia, es decir, se emplean con una función de autoprotección (Briz y Estellés, 2010; Briz, 2011; Briz y Albelda, 2013; Villalba, 2015). Así, concordamos con Albelda (2004, 2008, 2010, 2012) en que, en la entrevista semidirigida, la atenuación se da principalmente con el fin de cuidar la propia imagen. Por este motivo, creemos que se hacen necesarios nuevos trabajos que analicen el uso de las partículas que hemos estudiado en otros géneros orales, para poder determinar si, dependiendo del género analizado, como y como que podrían también cumplir una función atenuadora de prevención o de reparación (Briz y Estellés, 2010; Briz, 2011; Briz y Albelda, 2013; Villalba, 2015), donde entre en juego también la imagen del interlocutor.

La realización de este estudio ha abierto para nosotros interrogantes acerca de lo mucho que queda aún por estudiar en relación con estas partículas. Proyectamos algunos trabajos dedicados, por ejemplo, a determinar con qué elementos se combinan (así como, algo así como, como que no sé, como que igual, entre otros) o qué elementos son modificados sintácticamente por los aproximadores como y como que en el español de Chile, con el fin de establecer, por ejemplo, si las funciones de una u otra partícula pueden variar en relación con el ámbito que modifican (sintagmas nominales, adjetivos, sintagmas adverbiales, etc.).

Asimismo, dada la polifuncionalidad de como, creemos necesaria la realización de futuras investigaciones que ahonden en las variadas funciones que cumple en el discurso, además de la aproximación y la atenuación, y así ampliar los resultados obtenidos en este trabajo. Ante esto, y aunque más allá de los objetivos que nos hemos planteado, se han recuperado otras funciones derivadas del uso aproximador de como que comentaremos brevemente: la aproximación numérica (26) y la introducción de discurso directo (27):

 

M2A6: No, yo con suerte me subí como tres veces al metro.

M6A1: Y ahí nos quedamos en la esquina y a mí me dio rabia, porque a la señora que la habían asaltado y le habían quitado, no hacían nada, estaba como “uy, ¿qué voy a hacer? Me robaron. Mi monedero tenía plata, oh, ¿qué voy a hacer?”, y nada más.

 

El ejemplo 26) deja entrever no una similitud conceptual entre elementos, sino proximidad en una escala (Mihatsch, 2009, 2010). Esta función se trata así de aproximar un valor numérico, que se puede relacionar con tiempo, distancias o cantidades, principalmente (Panussis y San Martín, 2017), aunque también los datos de nuestro corpus nos han permitido observar que se vincula con fechas, cursos académicos, edades, porcentajes, unidades de medida, entre otros. Para esta función se ha establecido, además, que la introducción de aproximaciones numéricas solo es posible por medio de como y no de como que (Panussis y San Martín, 2017).

En 27), por su parte, el uso de como permite a la hablante introducir un discurso directo. La principal característica que presenta esta función es que la cita que se introduce no es literal (Mihatsch, 2010; Holmvik, 2011; Jørgensen, 2011; Panussis, 2016; Mondaca, 2017; Panussis y San Martín, 2017). Además, esta función no solo se relaciona con la reproducción de discursos directos ajenos, sino también de interjecciones, gestos y pensamientos (Holmvik, 2011, Panussis y San Martín, 2017).

Aunque no hemos considerado estos casos en el estudio que presentamos hoy, sí hemos podido observar que, con mucha frecuencia, los hablantes chilenos realizan aproximaciones numéricas, por medio de como, e introducen directo, mediante como y como que. Así, nos proponemos abordar estas funciones en un estudio posterior.

Finalmente, nos parece pertinente señalar que, hasta ahora, no hay registro de estudios que se hayan centrado puntualmente en analizar las partículas como y como que como aproximadores en el español de Chile y la relación de esta función con la atenuación pragmática. Por esta razón, creemos que nuestro trabajo puede considerarse una contribución al estudio de estas partículas en esta variedad del español y que puede complementar trabajos previos (Jørgensen, 2011; Panussis, 2016; Mondaca, 2017, Panussis y San Martín, 2017). Así, creemos que los resultados obtenidos pueden ser retomados, discutidos y complementados en nuevos estudios que continúen analizando las múltiples funciones que desempeñan como y como que.

Agradecimientos

Expresamos aquí nuestro más sincero agradecimiento a la Dra. Marta Albelda Marco, académica del Departament de Filologia Espanyola de la Universitat de València, quien amablemente nos ha orientado y aconsejado durante todo el proceso de elaboración de este artículo.

Agradecemos también a la Dra. Marcela Rivadeneira Valenzuela, académica del Departamento de Lenguas de la Universidad Católica de Temuco, Chile, quien nos ha facilitado parte del corpus de entrevistas sociolingüísticas recopilado en el Proyecto Fondecyt 11110211, dirigido por ella entre los años 2011 y 2014.

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Notas

[1] En los trabajos citados, esta concreta subfunción pragmática se ha denominado con el mismo término que este trabajo emplea para el valor semántico hiperónimo de aproximación en el sentido de vaguedad lingüística aquí estudiado. Por ello, en el presente trabajo, para referirnos a aproximación de valores numéricos, se emplea la etiqueta “aproximación numérica”nos proponemos estudiar  los revios y con los datos de nuestro corpus,  corpus lingintuyo que es asñi). Iodrposibilidades expect.nos proponemos estudiar  los revios y con los datos de nuestro corpus,  corpus lingintuyo que es asñi). Iodrposibilidades expect

[2] Las autoras utilizan la denominación aproximativos en lugar de aproximadores.

[3] Esta misma idea se recoge en Fuentes (2016, p. 114), donde el valor aproximativo que como ejerce en una aserción “puede consistir en una cuantificación o en una valoración, que no se afirma de manera precisa, sino aproximada, estableciendo el hablante los márgenes entre los que sitúa lo dicho”.

[4] Ejemplo extraído del Diccionario de la lengua española. No se han encontrado ejemplos de este tipo de comparación en el corpus de análisis.

[5] Ejemplo extraído de Mihatsh (2010, p. 177).

[6] Etiqueta para identificar a los informantes en el proyecto desde donde se extrajeron las entrevistas:

M = hablante mujer; 4 = número asignado a la ciudad de procedencia (4 = Santiago); A = perteneciente al grupo etario A (hablantes de entre 18 y 24 años); 4 = número asignado a la informante dentro de su grupo etario.

[7] Proyecto financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondecyt), número 11110211. Fondecyt es un programa dependiente de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), perteneciente al Ministerio de Educación del Gobierno de Chile.

[8] = Suspender.

[9] Para una explicación en profundidad sobre las funciones de la atenuación, véase Albelda, M., Briz, A., Cestero, A. M., Kotwica, D., y Villalba, C. (2014). Ficha metodológica para el análisis pragmático de la atenuación en corpus discursivos del español. (ES.POR.ATENUACIÓN). Oralia, 17, pp.

[10] Ejemplo extraído de Albelda et al. (2014).

[11] Ejemplo extraído de Villalba (2015).

[12] Se han marcado en cursivas los usos de como y como que que analizamos en cada ejemplo. Asimismo, se ha optado por subrayar los elementos modificados por estas partículas.

[13] = Muy bien.

[14] = No sentirse capaz.

[15] = Mucha.

[16] “Sha” corresponde a la imitación de cómo suena la pronunciación de la ch en la clase baja (vulgar).

[17] El concepto flaite se refiere peyorativamente a la clase baja (vulgar) de Chile. Se asocia, principalmente, a jóvenes con poca educación, mala dicción y vinculados con delincuencia y la drogadicción.

[18] = Desgastador (error de pronunciación).

[19] = Almacén de barrio.

[20] = El concepto pelolais en Chile se refiere a mujeres jóvenes, de pelo rubio y liso, delgadas y que, por lo general, pertenecen a una clase social alta.

[21] La informante habla acerca de la relación cercana que tiene con su abuelo, quien es un hombre de edad muy avanzada, y la mala relación familiar que tiene con sus padres.

[22] = Trabajo.